Este recurso está diseñado para que los niños en edades de 4 a 6 años comiencen a familiarizarse con la forma y el sonido de la letra L, tanto en mayúscula como en minúscula. El trabajo con letras aisladas es una etapa fundamental en la conciencia fonológica, base del proceso lector.
Habilidades que se desarrollan:
- Motricidad fina: al trazar las letras siguiendo líneas punteadas, los niños ejercitan el control del lápiz, la coordinación viso-motriz y la presión sobre el papel.
- Conciencia fonológica: la asociación del sonido /l/ con la palabra “león” refuerza la identificación auditiva de la letra.
- Reconocimiento visual de letras: se aprende a diferenciar visualmente entre la L mayúscula y la l minúscula.
- Atención y concentración: seguir el trazo correcto requiere atención a los pasos y control de la impulsividad.
- Confianza y perseverancia: repetir el trazo varias veces permite afianzar aprendizajes y celebrar logros.
Edad recomendada:
Niños de 4 a 6 años, especialmente en niveles de infantil 2º-3º ciclo o primero de primaria.
Actividades complementarias sugeridas:
- Formar la letra L con plastilina.
- Buscar objetos que empiecen por la letra L en casa o en clase.
- Jugar a encontrar la L en un cuento o cartel.
- Pintar el dibujo del león y contar palabras que empiecen igual.
- Trazar la letra con el dedo sobre arena, harina o una bandeja sensorial.
Claves para los padres:
Este tipo de ejercicios requieren práctica constante y paciencia. Algunos niños necesitarán más repeticiones, y eso está bien. La letra no tiene que quedar perfecta al principio; lo importante es el proceso. Elogiar el esfuerzo y no solo el resultado ayuda a fomentar la motivación. Si se equivocan, es una buena oportunidad para hablar del error como parte del aprendizaje. La rutina, el cariño y un entorno tranquilo son grandes aliados en esta etapa.